jueves, 9 de mayo de 2013
PERDON
EL PERDÓN
(Salmo 86:5)
¡Hola!
Que bendición poder de nuevo saludarles, es un privilegio además dirigirme
hacia ustedes y compartir un nuevo tema, que estoy segura será de mucha
bendición al recordar que en Cristo podemos obtener ese
hermoso regalo y que al recibirlo también lo podemos obsequiar, poniéndolo en
práctica ¿Qué
te parece entonces si hoy hablamos sobre EL PERDON?
Quiero
que iniciemos recordando un poco sobre la creación del primer hombre y la mujer ¿recuerdas como se llamaron? ¡Exacto! Adán y Eva.
Cuando Dios los creo los puso en un lugar muy hermoso, ¿Cómo se llamaba ese
lugar? ¡Sí! El Edén, nos cuenta la Biblia en el libro de Génesis que dentro del
jardín donde Adán y Eva habitaban había un árbol del cual Dios les había dicho
no comer su fruto, Dios les prohibió hacerlo, sin embargo y si ya leíste la
historia, recordarás que Eva fue la primera en desobedecer, y luego lo hizo
Adán.
Esa
desobediencia, como todas, tuvo sus consecuencias, y Adán y Eva fueron echados
del hermoso jardín. A partir de ese momento el pecado entró al mundo y los
primeros seres humanos en la tierra tuvieron que atravesar muchas situaciones
difíciles por causa de haber hecho lo que no debían.
A
medida que los seres humanos se fueron multiplicando, el pecado también hasta
llegar al tiempo en el que tu y yo estamos viviendo. Vemos como abunda la
mentira, el odio, el egoísmo, la violencia, etc., etc.
Como
todos nacemos bajo una naturaleza de pecado, necesitamos ser perdonados, y el
único que puede hacerlo es Jesús, recuerda que el vino a éste mundo y murió en
la cruz para que tu y yo pudieras recibir ese obsequio.
¿Cómo se recibe ese perdón?
¡Sencillo!
A través de un arrepentimiento genuino, de reconocer que has fallado, que has
desobedecido a Dios y a su palabra y que le necesitas. Cuando tú abres tu
boquita y comienzas a pedirle al Señor que te perdone, El, que conoce tu
corazón sabrá si realmente lo deseas, al ver que
si, sin dudarlo TE
PERDONARÁ.
¿Sabes?
en una ocasión escuche decir a un niño que él no necesitaba el perdón de Dios
porque sus pecados eran pequeñitos como el, dijo que siempre trataba de que sus
mentiras fueran pequeñas y blancas, y pues déjame decirte que eso no es así, el
pecado no esta clasificado por color, forma o tamaño, no existen las mentiras
grandes y pequeñas, la mentira es mentira y por ende es pecado. Esto nos deja
claro queTODOS, grandes y pequeños necesitamos ser perdonados por
el único que puede hacerlo, por Jesús. ¿Ya recibiste tú ese perdón? Espero que SI, y si tu respuesta esNO ¿Qué
es lo que estas esperando? El tiempo esta pasando muy rápido, Dios quiere obrar
en tu vida hoy mismo.
Ok,
espero te haya quedado muy claro como a través del amor y sacrificio de Dios, y
de un arrepentimiento sincero
podemos recibir el PERDON de nuestro creador, ahora, al inicio te dije que
éste sería un tema que si lo poníamos en practica, sería de mucha bendición y
que además debíamos obsequiar a otros, chicos, de la misma manera como El
recibe nuestro arrepentimiento siendo,
Perfecto, Santo, Rey de Reyes, Dios Omnipotente no nos da lo que realmente
merecemos, sino, nos recibe, nos alienta, nos fortalece haciéndonos sentir su
perdón, nosotros también estamos cordialmente invitados a perdonar a aquellos
que nos hacen mal.
En
nuestra vida, los hijos de Dios estamos expuestos a encontrarnos con personas a
quienes no les agradamos, simplemente por que eres y tienes lo que ellos no,
hay quienes no les gusta ver en ti las cosas grandes que Dios hace, tu
prosperidad les ofende y te conviertes en el blanco de sus criticas, burlas,
habladurías etc, sé que hay algunos que son capaces hasta de agredir a otros,
tú amiguito(a) ahora mismo puedes estar pasando por eso, tal vez un compañerito
o compañerita de tu lugar de estudios, cada vez que te ve, te ofende, se burla,
sé que quizá has sentido el fuerte deseo de darle su merecido, pues consideras
injusta su agresión, o a lo mejor ya reaccionaste y estas sintiéndote mal por
eso. No permitas que Satanás te involucre en su juego sucio, el lo que quiere
es hacerte caer en la tentación y que hagas lo que a Dios no le agradaría.
Sé
que a veces no es fácil soportar situaciones como esta, y Dios también lo sabe,
recuerda que cuando el vino en forma de hombre a esta tierra, fue agredido
también, llegando a ser crucificado. El te entiende y quiere que sepas que está
contigo y quiere defenderte, habla con el, cuéntale lo que estas pasando, y
pídele que te ayude a brindarles a quienes te atacan el perdón que un día Él te
obsequio a ti
La
Biblia es muy clara cuando nos dice: “Es de sabios tener paciencia, y es más
honroso perdonar la ofensa”. (Proverbios
19:11)
Si
tu eres hijo de Dios y anhelas seguir sus pasos, si quieres ser como el, si
cada día te esfuerzas por hacer su voluntad, definitivamente debes comprender que la mejor manera es imitándole, y si
Él siendo quien es perdona nuestras transgresiones,¿Quienes somos nosotros para no hacerlo con nuestro
prójimo?
La
Biblia dice “Si
ustedes perdonan a otros el mal que les han hecho, Dios, su Padre que está en
el cielo, los perdonará a ustedes. Pero si ustedes no perdonan a los demás,
tampoco su Padre los perdonará a ustedes”.
(Mateo 6:14-15)
Así
que despójate de esa naturaleza humana que tanto nos mete en problemas y trata
de agradar a aquel que un día murió por ti, y aun por quienes no te quieren.
RECUERDA:
DIOS TE
PERDONA, PERDONA TU A OTROS
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